Trotar para ser flexible y saludable

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TROTAR PARA SER FLEXIBLE… Y SALUDABLE
¿Se ha propuesto adelgazar, en serio? Sepa, que trotar puede convertirse en una ayuda decisiva para ese propósito. Cuando se lleva una vida sedentaria, el metabolismo pierde velocidad, y se gana… peso. No hay mejor forma para acelerar el funcionamiento de su sistema “quemador de calorías” que mantenerse constantemente activa, y vigilante de cuanto come.

Antes de ir a trotar…
Beba despacio una pequeña cantidad de líquido, no demasiado azucarado, para evitar que cuando el azúcar se gaste durante el ejercicio, sobrevengan una hipoglicemia y una fatiga súbita. Algunos sostienen que el agua es la "bebida natural, original, sin calorías", y recomiendan que para trotar se tomen pequeños sorbos cada 20 o 30 minutos, parando unos instantes la carrera. El hierro y el zinc son minerales que se pierden al sudar, y no se pueden ser repuestos adecuadamente con una dieta para reducir las calorías, el potasio también se puede ver disminuido (mineral esencial, se encuentra en tomates, plátanos y naranjas), por lo cual no vendría mal reforzar el consumo de frutas y vegetales. Las personas que están a dieta suelen tener hambre todo el día, pero haciendo varias mini-comidas, usted puede sentirse satisfecha la jornada entera. Haga meriendas a media mañana, a media tarde y por la noche, que pueden incluir una fruta o vegetal.


¿Cuál es el momento ideal para trotar?
Debe decidirlo usted misma, después de calcular su horario. No obstante, hacerlo en horas de la mañana ayuda a quemar calorías fácilmente durante el resto del día. Quienes hacen dietas y ejercicios al mismo tiempo, pierden fundamentalmente las grasas, a la vez que entonan los músculos. Trotando se previenen enfermedades cardiovasculares; también se reduce la propensión a adquirir infecciones. Pero es preciso tener la precaución de realizar el trote con moderación. Si surgen problemas ortopédicos, amenorrea secundaría (la menstruación desaparece temporalmente) y depresión, hay indicios de que usted está exagerando las cosas. El equilibrio se convierte en obligado para que los resultados sean satisfactorios.